En un pequeño pueblo del norte de Italia, vive Giovanni junto a su esposa Paola y sus dos hijos adolescentes: Irene, la mayor, y Andrea, el pequeño de la familia. El patriarca trabaja como psicoanalista en un despacho cercano a su apartamento. Su apacible vida contrasta con la de sus pacientes, que sufren todo tipo de trastornos, mientras que él vive rodeado de rutinas y tranquilidad: correr, leer, escuchar música… Un día, un paciente le llama para una urgencia, por lo que Giovanni, que acostumbra a salir a correr con su hijo, se ve obligado a cancelar la cita. Andrea, por su parte, decide ir a bucear con unos amigos, pero pasan las horas y no regresa a casa...